30 septiembre 2005

Me pregunto por qué...
Quizás sea por tus preciosos ojos, tu increíble mirada, por todo lo que dices sin hablar, porque me encantaría perderme en tu mirada, y dejar pasar el tiempo, sin más...
Quizás por tus labios, por esa sonrisa que siempre asoma en ellos, por su forma, su textura, por todas esas palabras que surgen a través de ellos...
Quizás por tu cara, que no querría perder de vista ni un segundo, la perfección...
Quizás por tu pelo, que sabes transformar en la mejor telaraña, para atrapar a cualquiera en el, porque es la pieza que mejor encaja en una rostro tan hermoso, aunque a ti no te guste...
Quizás por tu cuerpo, se podrían escribir líneas y líneas sobre él, pero una palabra las resume: perfecto...
Quizás por tu inteligencia, por tu impresionante inteligencia, unida a tu capacidad para estudiar, que revela tu provechoso futuro, aunque ante ti surja un mar de dudas; es lógico pero, hagas lo que hagas, no te equivocarás...
Quizás por tu forma de ser, por esos cambios de humor, que denotan tu gran empatía, porque te permites admitir tus errores, porque reconoces los de los demás ;) ...
Quizás por esa única habilidad que tienes para completar mis pensamientos, para acabar mis frases, para dar sentido a mí yo, como parte de una sola entidad, por esa increíble compenetración que existe entre tú y yo, que nos permite saber que pensamos...
Quizás por tu filosofía que a veces choca con la mía, y nos permite entablar esas conversaciones, esas conversaciones eternas, que llegan a niveles a los que nunca he podido llegar con nadie, a pensamientos tan profundos que me desvelan...
Quizás por tu forma de escribir, que por mucho que lo niegues, es sublime, incluso en una conversación informal, y pagaría por leer tu obra...
Quizás sea porque eres capaz de arrancarme las palabras con una facilidad indescriptible, porque me hechizas...
Quizás porque eres la figura en la niebla, la imagen que vuelve a mi cabeza insistentemente, negándose a desaparecer, ese recuerdo, esa esperanza, ese sueño...
Quizás porque envidio ese apego tuyo a la libertad que, aunque me duela, me arrodillo ante él, ya que comprendo lo que no puede ser, pese a que no lo quiera saber...
Quizás porque has anulado mi verso, y casi mi prosa...
Quizás porque eres capaz de perdonar todas mis estupideces...
Quizás porque sería capaz de pasarme toda la vida junto a ti...
Quizás porque me muero de ganas de pasear por la alameda, esa noche lluviosa...
Quizás...

...quizás por todo eso, y muchísimas cosas más que no soy capaz de describir, quizás por todo eso
te quiero.

16 septiembre 2005

Llamada perdida


Cuando las faldas sean más cortas que el otoño que nos espera.
Cuando yo quiera ser quien debo ser…
Entonces te llamaré, una luz encendida en tu móvil que no vibra,
no oye, no dice nada.
No cogerás.
En la pantalla:
“Una llamada perdida
de:
Soledad”

07 septiembre 2005

Mi muerte

Supongo que si algún día muero -que no estoy del todo seguro de que vaya a ocurrir-, será en fin de semana. Cuando las familias se unen, los amigos se ponen ciegos a cubatas, las parejas se agarran de la mano y las de cincuenta para arriba sacan sus mejores y únicas galas. Sí, creo que será un soleado fin de semana, muy de belle epoque. La gente feliz tomando su vermú mientras leen los suplementos domicales, y yo, agonizando y cagándome en la madre de cada uno de aquellos que no hicieron méritos para ganarse mi respeto.Soy de lo más cascarrabias. Repito.




Gracias a aquellos que me animan a seguir en esta vida y, lo que es más importante, en este Blog.